lunes, 21 de septiembre de 2015

LA ULTIMA BALA.

Querido S:

Como Vuecencia sabe nuestra sagrada patria esta atravesando convulsos momentos que, desgraciadamente, acabaran con su existencia tal y como la habíamos conocido. Os creo seguro conocedor, de que tontos con plaza de garaje y ojos entretenidos hacen descerebrados comentarios, sobre cuestiones étnico-espirituales en relación con la pertenencia a la tribu hispana. Eso sí uno de los del ojo pirado, en concreto el torpe cineasta, a pesar de renegar de su españolidad lo cobra, por si acaso, triste bastardo que no supero la variada y díscola vida sentimental de su augusta progenitora.

En fin se podría decir de España lo que dijo el Papa Pio IX sobre nuestra Reina Isabel II, “es puta, pero muy piadosa”, en cambio su retataranieto, no es más tonto porque no entrena. Pero en todo caso Sire, mis cuitas de las cuales os habló en esta misiva, hacen referencia a nuestro “común amigo” y sus opiniones sobre su amigo el Viejo Lobo, de las pocas personas que junto conmigo le aguantamos más de 5 minutos sin salir corriendo.

El caso es que nuestro “común amigo” hecha pestes del Viejo Lobo, le echa la culpa de todo, es algo esquizofrénico, además siempre le hecha en cara que no tenga “ni puta idea de futbol” (sic). Entre Nos, también os digo que en el como de sus delirantes pensamientos, el otro día me decía que no soportaba que el Viejo Lobo, con su aire distinguido de gato, se podía poner una pequeña bolsa en bandolera, junto con una camisa de manga corta y despertar la admiración de todas las señoras de la contornada. Me comentaba nuestro “común amigo”, “coño es como lo que Andres Montes decia de los italianos, se ponen unos vaqueros y un polo de manga corta, y les sienta bien” (sic). Esa forma que tiene el Viejo Lobo de chalanearse a cualquiera con esa verborrea que Dios le ha dado, capaz a de venderle una nevera a un esquimal o una estufa a un beduino, en fin que tiene una prepotencia gatuna que no aguanta.
Pero sin embargo teníais que ver lo que lo admira, porque es un amigo que de verdad ha luchado por mantener su amistad, cuando las circunstancias invitaban a lo contrario, y cuando cualquier otro ya había desistido, porque así le iría mejor. Porque es un amigo que siempre esta ahí, nuestro “común amigo” dice que el Viejo Lobo le ha enseñado muchas más cosas a él que no al revés y sobre todo que en la balanza de la Amistad pesa mucho más lo que el Viejo Lobo le ha dado a él que lo él le ha dado al Viejo Lobo, y que además ya sabe como es nuestro “común amigo” tan torpe en sus expresiones como a la hora de mostrar sus sentimientos, y que no sabe decirle que el tener un amigo como el Viejo Lobo no es un honor es un privilegio, porque es ser un privilegiado que alguien como el Viejo Lobo te haya elegido como amigo. Y que ¡Hostias!, cuando venga el barquero, y ojala tarde mucho tiempo, nuestro “común amigo” espera que se lo lleve a él antes que al Viejo Lobo, porque ya esta harto de perder a gente que quiere y porque el Viejo Lobo es más necesario en este puto mundo que él.

En fin ya ve Vuecencia las “cavilaciones” de nuestro común amigo, seguiremos aguantándolo, sabemos por qué, pero no la razón. En fin seguid con Salud.


Saludos E.


      

2 comentarios:

El viejo lobo dijo...

La conclusión que saco tras leerle atentamente es, que afortunadamente esta usted como una cabra, por no decir loco de remate. Considere esta mi opinión en alta estima, dado que es la única manera decente de afrontar este cambalache de mundo que nos ha tocado vivir. Ya lo decía en el siglo XVI Erasmo de Roterdam en su Elogio de la Locura: más vale ser idiota o loco para sobrevivir en este asqueroso mundo.

Su recuerdo al gran "jugón" Andrés Montes me parece admirable y merecido. Siempre mostrando su mejor cara hasta el final.

Un abrazo y cuídese! Porque la vida puede ser maravillosa (Andrés Montes dixit)

EL FRANCOTIRADOR dijo...

Como le dijo don Miguel de Unamuno al rey Alfonso XIII, cuando le impuso una medalla, le agradezco muy honrado sus generosas palabras hacia mi persona, porque las merezco, se que otros dirían referidos a ellos mismo que no lo merecían, pero Sire, yo no miento ni ellos tampoco. Un beso Viejo Lobo.