martes, 9 de septiembre de 2008

UN AÑO SIN PACO*



El pasado 28 de agosto de 2008 se cumplió un año de la muerte de Paco Umbral,la verdad es que me enteré ayer hojeando"El Mundo",donde venía un artículo del médico que lo atendió en los últimos años.Vaya por delante que no soy en absoluto un "umbragólogo" como el viejo lobo,pero he de reconocer que tal vez fuera hasta su fallecimiento el penúltimo clásico vivo de la Literatura castellano,el último y espero que por muchos años es Miguel Delibes,como decía no he seguido tanto como otros la trayectoria de don Francisco,pero he de decir que considero brillantes los artículos que le leído y que tiene una prosa muy brillante,aunque también tengo que decir que ese personaje que el mismo se creo algunas veces por no decir bastantes me cargaba,porque por ejemplo en el artículo anteriormente citado escrito por su médico,habla de un Umbral entrañable y cercano,agradecido con el equipo médico que lo cuido,y yo añadiría una virtud que yo valoro mucho,amigo de sus amigos,desde luego el mundo es un lugar más triste y gris porque no estan en él personas como Santiago Amón,Luis Carandell,Jaime Capmany,Gila,etc y por supuesto también Paco Umbral.


*Dedicado desde la patria al viejo lobo,MI AMIGO.

6 comentarios:

Al Neri dijo...

Francotirador, me temo que no comparto tu simpatía (aunque no llegues a ser umbragólogo)por este escritor.

Antes que nada, debo reconocer que es un maestro de la literatura. He leído casi toda su obra y da gusto cómo escribe. Su columna Los Placeres y los días era para muchos -yo incluido- lo mejor de El Mundo.

Tras este análisis como escritor, debo decir que como persona y como español me parece un sujeto deleznable, cuyas novelas siempre han rezumado odio de clase, odio a la Iglesia y odio político.

Incurable obseso sexual (él acuñó el verbo "fornifollar")alcanzó los máximos niveles de perversión enfermiza en su repulsiva novela "El día que violé a Alma Mahler" (1988), donde describía, con todo lujo de detalles, la penetración a una niña decapitada a través de la vena aorta.

Al mergen de estas aberraciones, omo ya digo, su novelística está sembrada de insultos a la Iglesia, y muy concretamente en la Orden femenina de las Hijas de Jesús, de las que cobardemente insinúa en varios títulos que son unas putas.

Por último, su tratamiento de la guerra civil española ha sido sectario, injusto y falto de todo fundamento en su fanatismo por desprestigiar al bando nacional, mezclando en sus relatos el sexo, la violencia y lo que él llama fascismo en un cóctel desagradable y antihistórico. Recuerdo con especial "cariño" tres títulos vomitivos (pero magníficamente escritos): "La leyenda del César Visionario" (1992), "Madrid 1940: Memorias de un joven fascista" (1993)y "Capital del dolor" (1996), dedicada esta última a la represión en Valladolid, con una visión escandalosamente torticera. Estos libros recuerdan a una peli española por lo cutres y descarados que son en la temática.

Hispanicus dijo...

En este caso me sumo a Al Neri, no discuto su valía para la escritura, pero por lo demás es un ser impresentable, por los motivos que ha enumerado Al Neri, entre otros.

Un saludo

Anónimo dijo...

Señor francotirador, le agradezco su entrada, recordando la figura del mayor cronista español del siglo XX, y parte del XXI.

Paco sufrió mucho como persona: hijo de madre soltera, tuvo que soportar la muerte de su hijo Pincho a los 5 años, vitima de una horrible enfermedad, hecho que indudablemente marco su trayectoria.

Desde entonces se colocó, su máscara, unas veces festiva y burlona, cruel y despiadada, pero en todo caso sincera.

En cualquuier caso Paco, ta como él decía escribía mucho y vendía poco, por lo que como escritor y persona inteligente, tuviera que hacerse su propio marketing, para entre otras cosas poder comer. Desgraciadamente somos un páís de analfabetos que no compendemos nada, y la mayoria de las veces se tomaban al pie de la letra sus aseveraciones, al igual que le ocurria a su admirado Valle-Inclán.

No puedo terminar mi comentario sin recomendarle "las Memorias eróticas de Don Francisco Umbral", libro que se debería recomendar en los Institutos, o incluso como lectura obligatoria a tanto pazguato que nos rodea. Quizás aprendan algo, Paco puede hacer hasta milagros. Que así sea!

Al Neri dijo...

Tienes razón, Rutas. Era mejor no tomarse demasiado al pie de la letra sus aseveraciones, porque, de lo contrario, era para colgarle de un pino.

Lo de las memorias eróticas, leelas tú solo en casa mejor y deja a los pobres chavales del instituto, que bastante tienen ya con la Educación para la Ciudadanía.

Anónimo dijo...

Rutas eres un artista, lo de pazguatos les va algunos que ni pintado.

EL FRANCOTIRADOR dijo...

Respeto todas las opiniones pero no voy a entrar en polémica porque desde luego no soy un experto en Umbral y vosotros aúnque desde posiciones encontradas si,además estoy en La Patria y las lanzas las guardo para mi inminente vuelta a la selva.