LA APARICIÓN.

Estaba como todas las tardes,acabando de arreglar papeles del despacho,ese día hacia jornada doble,por lo que estaba un poco más quemado que de costumbre,"las compañeras",esas auténticas víboras,cuyo principios morales no eran ni siquiera inexistentes sino que simplemente no eran,le hacían no sentirse amargado porque petardas como ellas nunca conseguirían eso,simplemente le cabreaban sin más.Pero en este momento entró "ella" ,pidiéndole las llaves del despacho de al lado,era más joven que él,pero daba lo mismo,su sonrisa,sus ademanes,su voz,su sentido del humor,esa sensación que desprendía de estar en su mundo,aíslada de toda esa basura que les rodeaba cada día,había conseguido con algo tan simple como aparecer allí y en ese momento,arreglarlo todo,hacer que él se sintiera mejor,aunque se cohibiese algo en su presencia,pero daba lo mismo,él era feliz en ese momento con verla allí.