domingo, 24 de junio de 2007

OSMIN Y SUS HISTORIAS (X)

Osmín personaje real de o de ficción cuenta sus peripecias,sus tristezas sus alegrías lo que opina de la gente que le rodea,o lo que esa gente opina también de él.

Julio Ferrando me felicitó por lo brillante del discurso que le había preparado para que lo leyese en la Cámara de Comercio.Fue muy efusivo conmigo,aunque lo que más me gusto fue el "efusivo" cheque que su secretaria me entregó.Era un viernes por la tarde de finales de junio,tras salir del despacho de Ferrando me apetecía dar una vuelta por la zona del puerto,mi hija Zoraída se había ido ese fin de semana con mi ex,además el resto de mi familia también se iba a pasar el sábado y el domingo a Moraira,es decir tenía esos dos días para mi sólo.Cuando llegue al puerto,aparque el coche en un buen sitio,lo cual era algo raro,pues debido a las regatas todo estaba lleno,pero sin embargo aquel viernes por la tarde era diferente,tenía ganas de ver el mar de relajarme,de ensimismarme,de olvidar muchas cosas y de recordar otras,mi abuelo me solía llevar cuando era pequeño por allí,claro que todo era diferente,tenía más encanto era más solitario,pero ahora,y tengo que reconocerlo,se había por decirlo de alguna manera civilizado pero también apijotado.Me pedí un refresco en unos los bares de la playa,la gente pasaba unos corriendo,otros andando,había parejas mayores,otras jóvenes con sus hijos.

-¡Perdone!¿esta silla esta libre?-alguien me interrumpió en mis pensamientos y cuando volví la mirada hacia esa voz,allí estaba ELLA,tenía una expresión de dulzura y encanto a la vez,su voz melodiosa y tierna se correspondía con su rostro,su pelo ligeramente pelirrojo,que a modo de algo más de media melena era agitado por el viento si cabe la hacía más hermosa,solo la voz de la niña que iba con ella hizo que a duras penas pudiese articular palabra.

-Si...claro-apenas pude balbucear,pero ella con una una media sonrisa de complicidad me hizo tranquilizarme y también sonreír.Pero mi rostro dibujo una expresión de decepción contenida,cuando la niña exclamo-¡venga mama,estoy cansada!.

"¡Mama!"-pensé,¿por qué coño me pasaba eso a mí?.Efectivamente me había enamorado,como solo nos enamoramos los tontos,tal vez de quien no debía y cuando no debía.Ella y su hija se alejaron unos pocos pasos y se sentaron ocupando una mesa en el mismo bar que yo.La observe de forma disimulada durante un rato,con los nervios atenazándome.Su mirada candorasa hacia su hija si cabe la hacía más adorable,en un momento dado la niña que debía tener una edad similar a la de mi hija,salió corriendo disparada hacia un hombre que venía por el paseo,-¡el padre!-pensé,pero sentí una extraña sensación de alivio cuando dijo la palabra "tio".El hombre la abrazó,y le dio un beso,tras lo cual también besó a la mujer y pude escuchar-¿María,como estas?-.Así se llamaba ELLA,María,María,María repetí interiormente su nombre varias veces,como un autómata,y perdí la noción del espacio y del tiempo,hasta que el ruido de mi movil,me saco de mis pensamientos,lo mire y era el cabrón de Julio Ferrando.

-Osmín,querido amigo,este discurso pasará a los análes,por favor necesito hablar contigo urgentemente esta noche.

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